Barajas en la memoria. Nº2: “Dibujando un aeropuerto”

DIBUJANDO UN AEROPUERTO

Unos días antes de hacerse efectiva la compra de los terrenos para el nuevo Aeropuerto Nacional de Madrid, en el municipio de Barajas, la Gaceta de Madrid del 23 de julio de 1929 publicó el concurso de proyectos para la construcción del nuevo aeropuerto.

Las bases del concurso recogían que debido “…a la gran variedad y lo heterogéneo de las diversas obras e instalaciones, que ha de comprender el proyecto, como por la conveniencia de que unas y otras puedan ser aceptadas y adjudicadas separadamente, se admite que en cada proyecto se presenten varios contratistas, correspondientes cada uno a la especialidad de la instalación u obra a que su oferta de contrata se refiera...”

El día 24 de noviembre de 1929 se cerró el plazo de presentación de ofertas de dicho concurso al que se presentaron siete proyectos firmados por las principales firmas de la ingeniería y la arquitectura de la época: Blanco Soler, Bergamín, Fernández Shaw, Massot, Gutiérrez Soto, Levenfelt, el marqués de los Álamos, Rogelio Sol, Ramis Matas, Giménez y Carrascosa.

Perspectivas y maquetas de algunos de los proyectos presentados para el aeropuerto madrileño. 1929.

Dada las expectativas generadas por el concurso y el interés público que despertaba el nuevo aeropuerto, las maquetas y planos de los proyectos participantes se expusieron al público durante diez días del mes de diciembre en el edificio de Museos y Bibliotecas.

Las propuestas económicas se abrieron el 7 de diciembre e iban de los 3,1 a los 9,4 millones de pesetas.

El jurado del concurso estuvo formado por Emilio Herrera Linares, director de la Escuela de Aerotécnia; Modesto López Otero, director de la Escuela de Arquitectura; Tomás García Diego, Ingeniero de Caminos; Mariano de las Peñas, ingeniero Industrial; Joaquín Pérez-Seoane, ingeniero Militar; y Francisco Iglesias, ingeniero Militar.

El jurado calificador resolvió el concurso a favor de la propuesta del marqués de Los Álamos y de Luis Gutiérrez Soto, que recibieron el primer premio de 10.000 pesetas, siendo el montante económico del proyecto de 6.500.000 de pesetas. El proyecto ganador fue posteriormente modificado, simplificando su estructura y dotándolo de una planta en forma de avión, muy propia del diseño art decó que Gutiérrez Soto propugnaba por esas fechas.

Dibujo de la fachada del proyecto ganador de Luis Gutiérrez Soto. 1929
Plano en planta del proyecto finalmente construido
Fachada de la Terminal de Viajeros construida
Detalle de la fachada de la Terminal de Viajeros construida

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