Invasión de Ucrania: Un Sueño (Mriya) destruido

Debemos empezar con el lamento, la rabia y la amargura por la sinrazón que lleva a pérdidas de vidas humanas en esta invasión sin sentido, en cualquier mundo, éste o el que venga en el futuro.

Pero también compartir una triste y lamentable noticia para la historia de la aviación, la destrucción del avión de carga más grande del mundo.

Tras múltiples ataques al Aeropuerto  Gostomel o Hostomel Antónov (IATA: GML, OACI: UKKM) fuerzas militares rusas  han  destruido el Mriya (el Sueño)

El avión llegó a Ucrania procedente de Dinamarca el pasado 5 de febrero

Quiero contaros ahora algunas anécdotas de los Antonov en nuestro suelo patrio.

El Antonov 225 Mriya es “heredero” del mítico Antonov 124.

Hace ya muchos años, allá por 1989, un joven ingeniero aeronáutico recibió la llamada del genial Director del Aeropuerto de Palma de Mallorca, aquel gran vasco, Pedro Meaurio, que tenía al otro lado de la línea a Vicente Almoguera, a la sazón Director del Aeropuerto de Vitoria – Foronda.

Se trataba de, ya metidos con el PCN , ver si el avión Antonov 124 podría aterrizar sin “hundirse” en la pista o estacionamiento.

Cálculos, diríamos por encima, datos poco conocidos, pero determinación y seguridad en la operación, hicieron posible su aterrizaje en el magnífico y excelente aeropuerto de Foronda. Corría el año 1989.

Y es que Foronda, su hormigón hidráulico, su pista, su torre y su fanal es un orgullo de la ingeniería aeroportuaria en España.

Después, el Antonov 124 y nuestro protagonista el Antonov 225 Mriya han seguido pasando por Vitoria para gusto de sus gentes y aficionados que siempre llenaban esas preciosas campas.

Sin embargo, la primera vez que el Antonov 225 estuvo en España, no lo fue en un vuelo programado, sino que fue en una escala técnica e imprevista.

Corría el año 2002, más concretamente en el mes de diciembre, y una avería en uno de sus seis motores en la ruta Nueva York – Argel obligó al avión a “tirarse” en Palma de Mallorca PMI.

Los periódicos del día lo recogieron con sorpresa.

Las crónicas cuentan que llevaba juguetes en sus bodegas.

Juguetes, esos que hoy en este 2022 tendrían que abrazar tantos niños perseguidos por bombas y misiles.

Con la destrucción de este histórico avión, la aviación pierde por mor de una terrible invasión una aeronave única en su tipo, irreemplazable, la Bestia de los Cielos será también llorada por los aeronáuticos de todo tipo.

Sirva este homenaje de parte de la Sociedad Aeronautica Española, SAE.

Juan Manuel Gallego Garcia. Miembro de la SAE.

www.sociedadaeronautica.org .