Barajas en la memoria. Nº15: El nacimiento del Plan Barajas

Descartada la construcción de un segundo aeropuerto para la ciudad de Madrid, como demandaban algunas instituciones y organizaciones locales y regionales, y ante la imposibilidad de utilizar la Base de Torrejón de Ardoz para dar soporte al transporte aéreo comercial, las necesidades de ampliación del Aeropuerto de Barajas se convirtieron en urgentes en los años noventa.

Aunque en la mente de todos estaban ya las bases de los principales proyectos que se iban a desarrollar en la remodelación del aeropuerto, fue necesario realizar una actualización de la mayoría de las instalaciones aeroportuarias en unos casos y, en otros, construir nuevas áreas de servicio que absorbieran el desarrollo del tráfico que se estaba produciendo.

Nacía así el denominado Plan Barajas, coincidiendo prácticamente en el tiempo con el inicio de la actividad gestora por parte del nuevo ente público Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, Aena. El Plan Barajas nació como una unidad diferenciada dentro de la Dirección de Aeropuertos Españoles, ante la gran envergadura de las obras planificadas, lo que requería de una gestión integrada de las mismas. 

Cómo prolegómenos a la puesta en marcha de las obras del Plan Barajas, la construcción del Muelle Sur y el Muelle Norte, permitieron dar un respiro al proceso de facilitación de pasajeros y equipajes, si bien el principal nudo gordiano estaba en el área de maniobras.

De este modo, en 1995 se llevó a cabo la construcción de un edificio de unión de la Terminal Nacional con la Terminal Internacional que mejoró notablemente la conectividad entre ambos. Las obras se iniciaron en septiembre de 1993 y finalizaron en el mes de febrero de 1996 aportando una superficie de 27.000 metros cuadrados distribuida en 4 plantas

En el año 1997 se puso en servicio el Muelle Norte, designado como Terminal 3, que sumaba otros 31.000 metros cuadrados de superficie al área Terminal disponible, distribuidos en tres plantas y sótano. La planta baja, unida con la Terminal Nacional, ahora T2, ofrecía un novedoso servicio en el aeropuerto, como era una zona dedicada en exclusiva a los vuelos regionales, con servicios de facturación, embarque y recogida de equipajes propios.

Muelle Norte. Construcción
Muelle Norte. Interior

Apenas dos años más tarde, en junio de 1999 entró en servicio el Muelle Sur, dirigido a atender principalmente los vuelos internacionales, preferentemente los vuelos transoceánicos con Sudamérica, además de los vuelos de conexión con los países no adscritos al Tratado Schengen. La superficie del Muelle Sur sumaba otros 30.000 metros cuadrados al Área Terminal.

Muelle Sur. Interior
Muelle Sur. Vista Aérea

Se sumó a este ingente proceso modernizador la construcción del Centro de Carga Aérea, de la mano de la empresa Centros Logísticos Aeroportuarios, S.A., CLASA, filial de Aena, encargada del desarrollo de transporte aéreo de mercancías.

Centro de Carga Aérea

CLASA inició en 1994 la comercialización de más de 40 hectáreas al sur del aeropuerto, contando con un edificio de servicios generales de más de 23.000 metros cuadrados de superficie.

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